LEY
KARMICA DE CAUSA Y EFECTO
La ley del Karma (ley de
“causa y efecto”), por cuanto en su funcionamiento certifica nuestro avance en
los planos cósmicos, nos permite ser los “arquitectos” de nuestro destino.
Las experiencias de vidas
pasadas influyen de manera determinante en nuestras fortalezas o debilidades.
Las obligaciones o
compromisos no satisfechos en esas vidas anteriores deberán ser honrados en la
actual.
No contar con un número 6 en tus nombres y apellidos revela:
Falta de
responsabilidad.
Un kármico seis debe
aprender mucho sobre el sexo opuesto.
Debe aprender a ser buen padre o
buena madre, dando de su propio ejemplo.
La responsabilidad se le exigirá en
todo momento.